Este proyecto aborda la educación desde la perspectiva de los derechos humanos, garantizando el acceso a una educación inclusiva, equitativa y de calidad. Promueve la dignidad humana y busca erradicar cualquier forma de discriminación. La Constitución de la República del Ecuador del 2008 y la Ley de Educación Intercultural del 2021 refuerzan la responsabilidad del Estado de ofrecer una educación integral y especializada a grupos vulnerables, incluyendo la atención en aulas hospitalarias y domiciliarias, centros especializados para el tratamiento de problemas de consumo de alcohol y otras drogas, centros de adolescentes infractores, centros de privación de libertad, casas de acogida, así como a estudiantes con dotación superior o altas capacidades y aquellos con sordoceguera.
Además, se fomentan estrategias pedagógicas inclusivas que abordan las diversas necesidades de aprendizaje, integrando enfoques específicos para estudiantes con discapacidades y en situaciones de vulnerabilidad. El objetivo es prevenir el abandono escolar y promover la inclusión social, asegurando que todos los estudiantes reciban la atención adecuada para su desarrollo académico y personal.
